Siempre pienso que los tacos hay que decirlos en momentos oportunos. Este es uno de ellos. He recibido un correo de una ex-alumna a la que le han robado su cámara de vídeo. El ladrón es un hijo de puta.La cámara que se la ha comprado con los ahorros de años de trabajo y esfuerzo se la ha quitado un hijo de puta. Los alumnos de los colegios públicos en los que enseño comparten los trabajos basura con los estudios, algunos quieren abrirse camino en este difícil mundo del vídeo y se compran con muchos esfuerzos económicos equipos para no dejar de practicar. Es un método para seguir aprendiendo cuando terminan los cursos oficiales y comenzar con pequeños trabajos profesionales.
Como dirían los de Chanante hay que decirlo más: HIJO DE PUTA.
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