La retransmisión de actos oficiales es un trabajo de televisión clásico coordinado por un profesional de la realización. Esta mañana he visto la primera hora del desfile del Día de la Fiesta Nacional,cuya imagen institucional realizaba Tve.Los realizadores Ángel Povedano y Malco Falcó disponían de un gran operativo técnico, dos unidades móviles con un total de 23 cámaras:
- 1 en un helicóptero
- 1 en un avión de transporte
- 1 en un vehículo acorazado
- 1 en una grúa de 26 metros,
- 1 steadycam.
- etc.
Es un acto muy institucional y la planificación de las cámaras también. En la realización los puntos de vista de las cámaras y las transiciones están al servicio de la narración, del objetivo de la historia. Este fragmento del izado de la bandera nos remite a una estructura del cine más clásico: primeros planos del héroe, contrapicados de la bandera y fundidos encadenados muy lentos en las transiciones. Todo coordinado y realizado en directo, donde reside la base de la buena televisión.
No quiero comentar contenidos éticos, no es el momento. Pero si quiero hacer referencia a la emisión de Telemadrid que por momentos ha rozado el absurdo. La realización era la institucional de Tve, pero, cuando utilizaba sus cámara, no tenían ningún sentido, estaba en la Castellana como si pasasen por allí. Ni el realizador, ni el cámara, ni la reportera tenían nada preparado, todo era improvisación. La reportera (no periodista) preguntaba, en directo y sin ningún rubor, a los militares por el nombre de los modelos de tanques.
Bueno, me ha servido para entender a un profesional que hace la preproducción requerida (prepara y planifica), y a un un profesional que improvisa y le vale todo. Dos formas de entender la realización multicámara. La primera requiere esfuerzo y talento, la segunda improvisación y desvergüenza.
No quiero comentar contenidos éticos, no es el momento. Pero si quiero hacer referencia a la emisión de Telemadrid que por momentos ha rozado el absurdo. La realización era la institucional de Tve, pero, cuando utilizaba sus cámara, no tenían ningún sentido, estaba en la Castellana como si pasasen por allí. Ni el realizador, ni el cámara, ni la reportera tenían nada preparado, todo era improvisación. La reportera (no periodista) preguntaba, en directo y sin ningún rubor, a los militares por el nombre de los modelos de tanques.
Bueno, me ha servido para entender a un profesional que hace la preproducción requerida (prepara y planifica), y a un un profesional que improvisa y le vale todo. Dos formas de entender la realización multicámara. La primera requiere esfuerzo y talento, la segunda improvisación y desvergüenza.
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