23 de agosto de 2007

LA ANGUSTIA QUE PRODUCE DECIDIR DÓNDE VA LA CÁMARA

Cuando he realizado un programa de vídeo me han acechado las angustias. La que siempre está es la decisión de dónde poner la cámara. Es el momento en el que las miradas de todo el equipo se dirigen hacía ti, esperando que asumas la responsabilidad de situar la cámara.

En clase cuando las explicaciones teóricas (Movimientos de cámara, ángulos de cámara, Punto de vista, etc) están expuestas y los alumnos pasan a las prácticas y tienen que decidir dónde va la cámara, surgen los momentos de angustia. Es un instante clave para los alumnos, es cuando se autoseleccionan aquellos que van a asumir responsabilidades directas en los procesos de trabajo y los que serán colaboradores en la realización de programas.

Woddy Allen en un artículo Un hombre de preguntas difíciles cuenta que Ingmar Bergman alguna vez estas angustias le acecharon en sus sueños:
"Woody, tengo un sueño estúpido en el que aparezco en el plató para rodar una película y no tengo ni idea de dónde poner la cámara; lo que pasa es que sé que se me da bastante bien y llevo muchos años haciéndolo. ¿Alguna vez tienes tú este tipo de sueños angustiosos?". O: "¿Crees que puede ser interesante hacer una película en la que la cámara nunca se mueva ni un centímetro y los actores entren y salgan del encuadre? ¿O la gente se reiría de mí?".

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